Es como tener un juguete... aprendes a usarlo, aprendes qué hacer con el y luego por razones de la vida, tienes la suerte de tener otro, distinto pero a la vez igual en las generalidades e intentas hacer que funcione usando las mismas mañanas con que lograbas hacerlo con tu primer juguete... no te das cuenta que tiene otros trucos si no hasta que lo has dañada demasiado .... A veces tienes suerte y puedes repararle pero otras no, otras ya está dañada para siempre y puede que funcione pero nunca lo hará igual que si te hubieras tomado la molestia de aprender de él antes de usarlo.
Yo soy el primer juguete, ella es el segundo.
Si, reconozco que la analogía no es de lo mas linda sobre todo en vista y considerando pero no puedo pensar en nada mas.
Han pasado tantas cosas y es tan poco el tiempo que no puedo terminar de procesarlas... hace dos noches me dijo que se iría con su padre biológico, Raul. fue... fue... me sentí muy mal, fue como que al decirlo ya comencé a sentir que se iba, me dolía por todas partes, hasta manifestante en un real dolor físico.
Quería gritarle rogarle que no, que se quedara pero no podía... no tenía derecho. Pero al final ayer lo hice, se lo pedí. no quiero sentirla lejos, quiero que dura mas tiempo, sé que terminará alguna vez pero no quiero que sea así.
Sé que le e hecho daño, que e traído muchas veces malos recuerdos a su memoria y con todo esto soy mala persona, egoísta y solo quiero tenerla para mi.
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